Vistas de página en total


I made this widget at MyFlashFetish.com.

sábado, 14 de mayo de 2011

Clockwork Prince Prologo

Prologo:
Los muertos desterrados


La niebla era espesa amortiguando el sonido y la vista: donde terminaba, Will Herondale podia ver el comienzo de la calle delante de el, resbaladizo y mojado, negro con lluvia y escuchaba las voces de la muerte.


No todos los cazadores de sombras podian escuchar fantasmas, y tampoco los fantasmas escogian ser oidos, pero Will era uno de los pocos que podia. Entre tanto se acercaba al viejo cementerio, aquellas voces se elevaban en un coro musical irregular: lamentos y suplicas, llantos y gruñidos. Este no era un cementerio pacifico, pero Will sabia eso: no era la primera visita a Crosse Bones Graveyar cerca del puente de Londres. Hizo lo mejor que pudo para bloquear las voces, encorvando sus hombros asi su collar cubria sus oidos, la cabeza abajo, una fina capa de lluvia mojando su negro cabello.


La entrada al cementerio esta a mitad de la cuadra: un par de puertas de hierro forjado estaban puestas en una alta pared de piedra. Cualquier mundano que pasaba podria ver el espesor de las cadenas que unia a las puertas cerradas, y la señal que decia cerrado -habian pasado quince años desde que un cuerpo fue enterrado qui, pero el lugar se mantenia por si mismo, todavia sin profanarse. Mientras Will se acercaba a las puertas, algo no mundano se materializo fuera de la neblina: una gran aldaba de bronce en forma de mano, los dedos huesudos y esqueleticos. Con una mueca, Will extendio una de sus enguantadas manos y levanto la aldaba, dejandolo caer una, dos, tres veces, el ruido metalico resono a traves de la noche sacudiendo las cadenas de fantasma de Marley.


Por un perido largo, nada sucedio. Detras de las puertas, Will vio niebla.


 Elevandose como el vapor de la tierra, oscureciendo las lapidas y alargando, parcas desiguales de tierra entre ellos. Lentamente la niebla comenzo a elevarse y unirse, tomando un misterioso brillo azul. Will puso sus manos en las barras de las puertas; la frialdad del metal se filtro a traves de sus guantes, dentro de sus huesos el tembló. Era mas que un ordinario frio - cuando los fantasmas se levantaron, drenando energia de su entorno, privando el are y el espacio de los calientes alrededores. Los cabellos del cuello de Will se erizaron y se levantaron mientras la niebla azul se arremolinaba, dando poco a poco la forma de una anciana, con un vestido harapiento y delantal blanco, con cabeza inclinada.


"Hola, Mol" dijo Will "Te ves particularmente bien esta tarde, si me lo preguntaras"


El fantasma levanto su cabeza. La vieja Molly era un espiritu fuerte, uno de los mas fuertes que Will se habia encontrado. Incluso aunque la luna nueva azechaba  por un hueco en las nubes, ella lucia duramente transparente, su cuerpo era solido, su espeso cabello de color rubio-gris trenzado sobre sus hombros, su piel, sus manos rojas apoyadas en sus caderas. Solo sus ojos eran huecos, dos llamas azules parpadeaban en las profundidades.


"William Herondale" dijo "¿De regreso tan pronto?"


Ella se movio hacia la puerta con ese deslizamiento peculiar de los fantasmas. Sus pies estaban desnudos y sucios, a pesar de que nunca toco el suelo.


Will se inclino contra la puerta. "Sabes que extrañaba tu hermosa cara."


Ella sonrio, sus ojos parapadearom, y alcanzo a ver su esqueleto debajo de su medio-transparente piel. Arriba, las nubes se habian cerrado de nuevo, nubladas, tapando la luna. Inutilmente, Will se pregunto que habia hecho la vieja Molly para ser enterrada aqui, lejos de tierra consagrada. Muchas de las voces fantasmales de la muerte pertenecian a protitutas, suicidas, y fetos -aquellos que no podian ser enterrados en un cementerio sagrado. Aunque Molly habia manejado la situacion de manera rentable para ella, asi que tal vez no le importaba.


Ella rio. "Entonces, ¿Que es lo quieres Cazador? ¿Veneno de malphas? Tengo la garra de un demonio morax, muy bien pulida, el veneno el la punta, totalmente invisible-"


"No" dijo Will. "Eso no es lo que necesito. Necesito polvos de demonio, de tierra fina."


Si un fantasma pudiera palideceer. La vieja Molly lo hubiese hecho, como era, parecio parpadear mientras Will habló, como la flama de una vela con una ventana abierta. Cuando el termino, volvio la cabeza a un lado y escupio una llama azul.


Will exhalo, su aliento pasaba  a la niebla del frio arire."Seguro." dijo  "No es la peor cosa de la que alguna vez cualquiera te hubiese pagado. Vieja Mol."


Era siempre de esta forma. Argumentaba, y despues se lo daba. Magnus ya habia enviado a Will con la vieja Mol, muchas veces, ahora, una vez por apestosas velas negras que se pegaban a su piel como alquitran, una vez por huesos de un niño no nacido, y otra vez por un mal de ojo de las hadas que habia goteado sangre a su camisa. Polvo Foraii de demonio sonaba agradable en comparacion.


Ella deslizo sus manos dentro de una bolsa al frente de su delantal. Cuando lo removio, sostenia una descolorida bolsa de tela, atada a un trozo de cinta sucia. Ella sacudio su cabeza lentamente. "Tu crees que soy tonta." dijo con voz ronca."¿Esta es una trampa verdad? Tu Nefilim atrapandome vendiendo este tipo de cosas y estacar a la Vieja Mol, lo es"


"Tu ya estas muerta" Will hizo lo mejor para no sonar irritable. "No se que es lo que creas que puede hacerte la Clave ahora."


"Bah" Sus vacios ojos llamearon. "La prision de los hermanos silenciosos, debajo de la tierra, pueden sostener a cualquier vivo o muerto, sabes eso, Will Herondale".


Will levanto sus manos. "Sin trucos. Seguro has de haber oido los rumores corriendo alrededor de los Subterraneos. La  Clave tiene otras cosas en su mente que rastrear fantasmas que trafican con polvos de demonios y sangre de hadas."


Se inclino hacia adelante. "Te dare una buena paga." El señalo una  bolsa de cambric de su bolsillo y la colgo el el aire. Tintineando como monedas traqueteando juntas. "Todos ellos llenan tus descripciones, Mol."


Una mirada ansiosa se apodero del rostro muerto, y se soldifico lo suficiente para tomar la bolsa de el. Ella hundio su mano lo suficiente y la llevo a su palma llena de anillo -anillo dorados de boda, cada uno atado en un nudo de tu amado en la parte superior. La vieja Mol, como muchos fantasmas, lucia siempre aquel talisman, la pieza perdida en su pasado que finalmente le permitiria morir, el ancla que la mantenia atrapada en el mundo. En su caso, era un anillo de bodas. Era comun creer, lo que Magnus habia dicho a Will, que el anillo desparecido, enterrado debajo de la cama limosa del Thames, pero mientras tanto habia tomado cualquier bolsa de anillo con la esperanza de que alguno fuera de ella. Hasta ahora no habia sucedido.


Ella metio los anillo de boda de nuevo a la bolsa, los cuales desaparecieron en algun lugar de una muerta persona, y le entrego un sobre doblado a cambio. El lo deslizo dentro del bolsillo de su chaqueta justo cuando el fantasma comenzo a brillas y desvanecerse. "Espera ahi, Mol. No es todo por lo que he venido esta noche."


El espiritu parapadeo mientras que la codicia peleo a su innato sentido de auto-preservacion. Finalmente, ella gruño. "Muy bien, ¿Que mas quieres?


Will dudo. No era algo para lo que Magnus lo habia enviado, era algo que el queria saber para si mismo. "Las pociones de amor-"

La vieja Mol chillo de risa. "¿Pociones de amor? ¿Para Will Herondale? No hay manera de rechazar el pago, pero cualquier hombre que luce como tu no tiene necesidad de pociones de amor, y eso es un hecho."


"No." dijo Will, con un poco de desesperacion en su vos. "Realmente, estoy buscando por lo opuesto-algo que tal vez le ponga fin a estar enamorado."


"Una pocion de odio?" Mol sono divertida.


"Estaba pensando en algo mas como a ¿Indiferencia? ¿Tolerancia...?"


Ella resoplo, asombrosamente humano para un fantasma. "Yo dificilmente podria decirte esto, Nefilim, pero si quieres que una chica te odie, hay formas mas sencillas  de hacer que suceda. No necesitas de mi ayuda con la pobre."


Y con eso se desvanecio, girando lejos entre la bruma de las tumbas. Will, despues de eso, suspiro. "no para ella," dijo, en voz baja, a pesar de que no habia nadie que lo oyera, "para mi... " y apoyo la cabeza contra la fria puerta de hierro.


Traduccion: CDS México

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cazadores de sombras es el mejor libro que e leído hasta ahora, y estoy deseando leer el resto de cazadores de sombras los orígenes, gracias por publicar el prologo